Los hermanos Leza son viticultores por pasión y profesión. Su abuelo ya elaboraba vinos en un calado de Uruñuela, mientras que su padre hizo la primera bodega moderna del municipio, donde por primera vez comenzó a elaborar vinos despalillados. Los Leza eran hasta el año 2000 “embotelladores ocasionales”: “Vendíamos graneles a otras bodegas, pero con la crisis del año 2000 decidimos que había que empezar a hacer marca propia y trabajar con más seguridad”, recuerda Fernando Leza.
El viticultor explica que la familia siempre ha contado con los recursos propios, sin inversores externos: “Comenzamos embotellando vinos jóvenes y, poco a poco, ampliando gama hasta que en el año 2004 nos lanzamos a la exportación, lo que nos vino muy bien con la siguiente crisis del 2008”. Bodegas Leza García es hoy en día uno de los principales exportadores de vino de Rioja a China y, de hecho, la exportación ha sido el camino elegido por esta bodega familiar hasta alcanzar una cuota del 70%, aunque el lanzamiento de la gama Nube, con un blanco semidulce, varietales de tempranillo blanco, sauvignon blanc y un clarete de poco sangrado, les ha procurado un gran éxito en el mercado doméstico: “La imagen más joven y desenfadada y la frescura de los vinos ha sido todo un revulsivo, hasta el punto de que hemos pasado de exportar el 70 % de nuestros vinos a bajar al 50 % para atender la demanda nacional del Nube”, concluye Fernando Leza.
La familia cultiva 110 hectáreas de viñedo en La Rioja Alta: Ábalos, Uruñuela, Alesanco y Hormilla y venden embotellada toda la producción, más la de algunas hectáreas de familiares cercanos. Trabajan varias gamas de vino, además de Nube: Valdepalacios como la más clásica, Leza García, con vinos más personales y modernos y LG, el vino top que solo elaboran en añadas especiales. Actualmente, están trabajando también con pequeñas fincas con la idea de lanzar una colección de vinos de Viñedo Singular, cuyos resultados iremos conociendo en breve.